domingo, 29 de noviembre de 2009

Courtyard Lullaby




Arriba en el cielo nocturno

las estrellas descansan en su abrazo

el patio muy quieto duerme

y la paz viene a tu cara.


Ven a mí, canta

escucha el pulso de la tierra,

los ritmos del océano nos jalan

para tener nuestros corazones en su mano.


Y cuando el viento pasa fuerte

sobre las ramas de los árboles

las aves nocturnas cesan su canto

y reunen recuerdos.


Anoche me hablaste de un sueño

donde los bosques se extendían hacia el este

y cada ave canta su canción

un unicornio se unió en festejo

y en un rincón se quedó

bajo un árbol de granadas

con flores salvajes, ahí

ningún ojo mortal puede ver.


Aun así, un misterio permanece

seguro, como el gallo canta en la mañana

el mundo en tranquilidad se queda

el secreto de los bebés al nacer.


Oí una vieja voz decir

No te vayas lejos de esta tierra

las estaciones tienen su camino

Ningún mortal puede entenderlo.


Loreena Mckennitt - Courtyard Lullaby

jueves, 19 de noviembre de 2009

Viviendo el pasado


Te conocí una vez bajo un manto de estrellas
Un día que apenas recuerdo, hace unos años
Mi corazón era todo para mí, tuyo fue en una vereda
Por primera vez mirando el mar caminamos.

Los días pasaron y pude sentir otras cosas más
Vimos atardeceres y el invierno convertirse en primavera
Momentos amarillos de compañía y de horas ya idas
Luego me abandoné en una eterna espera
Pues para no volver un día te ibas.

Años pasaron y nos volvimos a encontrar
Mi corazón con el frío había endurecido,
Y del tuyo ahora una dulzura parecía brotar
Con el mar despertaste en mí lo que ya estaba dormido.

Intentamos volver en el tiempo, a recuerdos ya vividos.
Pero la ilusión se ha marchado, como aquella noche de estrellas
Que ya casi se desvanece en el olvido.

Nos perdimos otra vez, a un lado del mar
Que rugía como nunca antes ha sido.
Su furia tuve que soportar, no será algo para olvidar.
Tú a mi lado, pero nuestro tiempo se había ido
Sólo me hizo recordar, que un momento te pude amar.

Te conocí una vez bajo un manto de estrellas,
Un día que apenas recuerdo, hace unos años
Me someteré ahora, con la ilusión que una vez había
Pues el tiempo ya no nos espera, ni las noches ni los días.

CARPE DIEM

Recuerdo


Todavía te recuerdo, si es que lo dudas
Algunas noches son tramposas, las tardes rosadas también
El viento es tuyo, aquel que los árboles soplan.

Todavía te recuerdo, si es que miras
Mi corazón late fuerte aun, mis ojos brillan también
Las estrellas son tuyas, aquellas que adornan tu noche.

Todavía te recuerdo, si es que me quieres
Puedo hacer la primavera más verde, el otoño también
La lluvia es tuya, aquella que cae en los rostros

Y así fue como pasó, que llegué hasta este día
Con regalos para ti, de pensamientos y recuerdos
Guárdalos bien, pues son de hoy para la vida.

Todavía te recuerdo, si es que me recuerdas
Tus miedos se desvanecen, tu soledad también
Soy tuyo, aquel que te escribe cosas bonitas.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Epílogo

Cuéntame una historia, a la luz del amanecer

la noche pronto llega a su fin

Nos sentimos ahora, sin un motivo especial

no hay nada entre nosotros, ni en nuestras pieles o en lo espiritual.



Una vez, sentí tu ausencia en mi ventana,

pues la noche parecía eterna.

Estabas en el cielo, libre como los vientos de Agosto.

También en el agua, indiferente y templada.



Estabas en el mundo, como el verde en primavera.

Aparecias en verano, como el sol y la calidez.

Permanecías frío, como las mañanas de invierno...

y te despedias, como las hojas de otoño en el viento.



Así pasaron muchos días, hasta que comprendí

prefiero sentir el viento fresco,

o la luz de la luna en mi rostro,

es lo que ha sido siempre para mí.



Cuéntame un cuento, a la luz del amanecer

no te duermas, hay algo que tengo que decir

las olas limpiarán mi corazón, y el viento, mi memoria.

Sueña ahora, que la noche pronto llega a su fin


Cuando despiertes mañana, me habré ido para siempre

pues el tiempo y las estrellas me consumen

A mí y a mis sentimientos.